El brote se produce a pesar de meses de vigilancia acentuada en criaderos de la zona fronteriza desde que la enfermedad se extendió a Corea del Norte.
Fuente: elnuevoherald.com
Corea del Sur continúa sacrificando miles de cerdos tras confirmar la presencia de la Peste porcina africana (PPA), en una granja cerca de su frontera con Corea del Norte, donde hubo un brote el pasado mes de mayo.
El primer caso de la enfermedad, altamente contagiosa, fue confirmado en pruebas a cinco cerdos que murieron en la granja, en la ciudad de Paju, manifestó el ministro de agricultura surcoreano Kim Hyun-soo.
Asimismo, el ministro indicó que se está estudiando un segundo posible caso en un criadero en la ciudad vecina de Yeoncheon, y que se esperaba tener los resultados para mañana.
Las autoridades planeaban sacrificar unos 4.000 animales en el criadero de Paju y otros dos establecimientos regentados por la misma familia. Al mismo tiempo, se acentuaron los esfuerzos para desinfectar criaderos y vehículos de transporte y se ordenó un cese de actividades de 48 horas en criaderos, mataderos y fábricas de alimentos para impedir la transmisión de la enfermedad.
Haremos los máximos esfuerzos para impedir la propagación de la enfermedad, creemos que la primera semana (después del brote) es la más peligrosa. Completaremos rápidamente las inspecciones en los 6.300 criaderos (en todo el país), examinaremos a cada cerdo para ver si tiene fiebre o no y analizaremos hasta el síntoma más leve, aseguró el mandatario Kim en conferencia de prensa en Sejong.
El dato
El brote se produce a pesar de meses de vigilancia acentuada en criaderos de la zona fronteriza desde que la enfermedad se extendió a Corea del Norte. En mayo, el gobierno norcoreano informó a la Organización Mundial de Salud Animal que 77 de los 99 cerdos en una cooperativa cerca de la frontera con China murieron de la enfermedad, y los 22 animales restantes fueron sacrificados.
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